Más de 42 millones de niñas en riesgo por no poder ir a la escuela

Todavía faltan semanas para la vuelta al cole en nuestro país, una fecha que se vive entre los nervios de un nuevo inicio y la ilusión del reencuentro con las amistades. Pero, lamentablemente, millones de niños y niñas en todo el mundo no podrán volver a la escuela. La pandemia del coronavirus ha dejado tras de sí una crisis educativa mundial que sufren especialmente las niñas y adolescentes en los países más pobres.
La ONU estima que 222 millones de menores en edad escolar están afectados por la emergencia educativa y necesitan apoyo. De estos, 78 millones están sin escolarizar y la mayoría son niñas: más de 42 millones de niñas y adolescentes en todo el mundo no van a la escuela.
Las niñas son especialmente vulnerables a esta crisis y no asistir a la escuela puede tener graves consecuencias en sus vidas.
¿Qué ocurre si las niñas no van al cole?
Miles de niñas en países empobrecidos se ven obligadas a abandonar la escuela y a ejercer trabajos con jornadas extenuantes, la mayoría vinculadas a labores del hogar. Otras muchas son obligadas a casarse y a convertirse en madres a muy temprana edad, cuando todavía no han alcanzado la madurez física ni emocional suficiente. Estas situaciones las alejan de la educación para siempre, merman su potencial y las perpetúa a vivir en situaciones de pobreza y discriminación.
La educación es la herramienta más útil y poderosa para que las niñas crezcan siendo niñas y se reduzcan las posibilidades de trabajo infantil, explotación, trata, matrimonios y embarazos precoces y cualquier otro tipo de violencia contra este colectivo especialmente vulnerable.
Las niñas sin educación tienen 3 veces más probabilidades de casarse antes de los 18 años
La educación salva vidas
Asistir a la escuela, especialmente en contextos de crisis y emergencia, ofrece un espacio de aprendizaje, protección y comunidad a niñas y niños. Contribuye a que vivan la situación con una sensación de más normalidad y esperanza, y les ofrece un futuro con más posibilidades. Sobre todo, las aleja de situaciones de riesgo que ponen en peligro sus vidas como el trabajo infantil y los matrimonios precoces.
Las niñas sin educación tienen 3 veces más probabilidades de casarse antes de los 18 años que las que tienen educación secundaria o superior señalan desde Girls not Brides. Esto demuestra que mantener a las niñas en la escuela es una de las mejores formas de retrasar el matrimonio en países pobres.
La pandemia ha aumentado de manera drástica la probabilidad de matrimonio infantil y UNICEF estima que hasta 10 millones más de niñas estarán en riesgo en los próximos 10 años. También señala que 1 de cada 3 niñas casadas del mundo vive en la India. Muchas de ellas dan a luz durante la adolescencia. La mayoría de niñas casadas viven en zonas rurales, pertenecen a familias pobres y no han alcanzado la escolarización en secundaria.